Cuando la vejez asome y tu voz se entrecorte al decirme te quiero y tu enjuto cuerpo llame al deseo, nos miraremos la piel curtida por el tiempo, se clavarán mil historias en miradas de unos ojos secos. Cuando la vejez asome y seamos pretéritos en este presente efímero; donde la prisa del tiempo nos vaya quitando el aliento y los cuentos se guarden en nuestros adentros; alguien habrá por escribir que urge en nuestro tiempo. Después presuma con pluma de lo que fue, viva historia en la vida de dos viejos. © Blanca |
Que hermoso, me encanta como escribís! Saludos
ResponderEliminarGracias Pipi, me alegra te haya gustado.
EliminarSaludos de vuelta.
Si vamos a ser pretéritos, que seamos pretéritos perfectos.
ResponderEliminarAbrazos, siempre
Pretéritos perfectos,hasta que podamos !!!
EliminarAbrazos de vuelta....