miércoles, 24 de julio de 2013

Café

Como cada mañana
crezco junto al humo del café.

Me estiro
y por un instante te plagio entero,
te dibujo,
abro tus palabras
y vuelvo a vocalizar
ese suspiro que me arranca llena.

Vuelo…
y vuelo hasta que el café se acaba.

Es entonces,
cuando los posos
dibujan la realidad del día.

Y calla…
el amor hirviendo.

© Blanca

1 comentario:

  1. Qué no daría por tomar contigo una taza de café humeante! Tengo pendiente una antología con poemas tuyos pero me gustan tanto y tantos que la selección se esta eternizando...
    http://fragmentsdevida.wordpress.com/2013/09/04/la-taza-de-cafe/

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